domingo, 31 de julio de 2011

Ahora dicen que cruzaron humanos con animales

Los bloggers de InfoCatólica son variados. Algunos son teólogos profesionales capaces de marear al lector con párrafos y párrafos de sofistería sin sentido (teología, por definición); otros, como Juanjo Romero, se permiten posts terroristas, como aquel que voy a comentar, titulado La Isla del Dr. Moreau: 150 híbridos humanos en el Reino Unido, cuyo único valor informativo es la demostración de que incluso un analista de Estudios de Mercado (sea lo que sea eso) puede creerse capaz de valorar una noticia que toca el complejo mundo de la interacción entre medicina, ética y genética, aunque no sepa distinguir entre una fuente confiable y un artículo del diario amarillista más conocido de las Islas Británicas, que no deja de ser sesgado y desinformativo sólo porque parezca confirmar los fingidos temores de un funcionario vaticano.

En pocas palabras:

  • No es cierto que se hayan creado híbridos entre humanos y animales. Lo que se creó fueron embriones, presumiblemente de uno o más de los distintos tipos permitidos por la ley británica, que incluyen embriones humanos con pequeñas porciones de ADN provenientes de una especie animal.
  • Los embriones producidos deben ser destruidos a los 14 días como máximo y no pueden ser implantados en humanos.
La Iglesia Católica se opone a la investigación médica con embriones, ya que —como sabemos— para el cristianismo un cigoto (una sola célula) tiene el mismo valor que una persona (un ser humano completo y viable). En particular se opone a la investigación con células madre embrionarias, porque ésta implica la destrucción del embrión; para desacreditarla, la prensa pseudomédica católica enfatiza que ninguna de las líneas de investigación con células madre embrionarias ha logrado resultados hasta ahora y que se puede lograr lo mismo, eventualmente, usando células madre provenientes del cordón umbilical (que no requieren enviar al cielo con Dios a preciosos embriones). Ambas cosas son verdades a medias, en tanto que ningún científico responsable ha dicho que las células madre vayan a ser una panacea instantánea (quizá pasen veinte años para que rinda fruto lo que se investiga hoy) y las células madre no embrionarias presentan problemas particulares para trabajar con ellas.

Como otras veces, la mentalidad esencialista se interpone entre la realidad y lo que reflejan los medios. No existe el “ADN humano”. La mayor parte del ADN que se encuentra en las células humanas es idéntico, o casi idéntico, al de los animales más cercanos a nosotros. De más está decir que eso no nos habilita a intercambiar alegremente genes entre especies, meter esa mezcla en un cigoto, implantarlo en un útero y ver qué sale; un mínimo de confianza en las leyes humanas y en la ciencia nos garantiza que nunca caeremos por esa pendiente resbaladiza a la que alude el ignorantísimo blogger de InfoCatólica (a menos que sea, precisamente, a causa de un “Dr. Moreau”, un individuo desequilibrado y amoral).

Un obvio corolario de la teoría de la evolución es que todos nuestros genes provienen de los animales de los que descendemos, con alteraciones mínimas o radicales. No provenimos de un molde único, con el que Dios nos formó y que luego rompió, sino de una receta biológica a la que la naturaleza ha ido agregando variaciones desde hace miles de millones de años. Experimentar con esa “receta” para buscar una variante más saludable no es inmoral en sí, mientras no olvidemos que el resultado final no es algo que podemos tirar a la basura. Pero está claro que a la Iglesia Católica no le importa lo moral ni el beneficio para los seres humanos: su preocupación principal es devolver a la ciencia, la filosofía y la ética a la prisión en que las mantuvo durante casi dos milenios.

sábado, 30 de julio de 2011

Religión y conformismo

“No quiero tener nada que ver con una religión que se ocupa en mantener a las masas satisfechas de vivir en el hambre, la suciedad y la ignorancia. No quiero tener nada que ver con ningún orden religioso o de otra clase que no le enseñe a la gente que son capaces de ser más felices y más civilizados, en esta tierra, capaces de transformarse en un hombre verdadero, amo de su destino y capitán de su alma. Para lograr esto, pondría a los sacerdotes a trabajar, y también convertiría los templos en escuelas.”
Jawāharlāl Nehru, primer ministro indio 1947–1964

lunes, 25 de julio de 2011

Apartar al hombre de Dios

Cardenal Antonio Cañizares 
Ustedes saben que trato de criticar las malas acciones y no las malas ideas, porque a fin de cuentas cualquiera puede tener una mala idea (como la idea de que hay que mutilar el pene de un niño para que Dios lo considere parte de su grupo exclusivo, o la idea de que las mujeres son inmorales si no se tapan todo el cuerpo excepto los ojos), y si no la practica, o incluso si la practica sólo en sí mismo y no en los demás, debe ser libre de hacerlo porque es su asunto.

Por lo mismo tampoco defiendo la censura legal de estas ideas, salvo cuando se expresen de manera tal que se entiendan como instrucciones para hacer daño a alguien más.

Entendiéndose que no propongo prohibirle decir lo que desee, me gustaría mucho al menos poder contestarle, en términos fuertes, al cardenal Antonio Cañizares, que es un funcionario del Vaticano del más alto orden y se supone que debería cuidarse mucho de que sus ideas no se interpreten como órdenes a los fieles católicos de hacer daño a alguien más. Cañizares acaba de comparar a los secularistas (es decir los laicistas, los que queremos que el estado y la sociedad no estén bajo el yugo de una religión) con los nazis.

No lo dijo así tan claramente; no tanto como Juan Pablo II, que en su tiempo dijo una vez que sólo una ideología sin dios puede planear un genocidio. (El genocidio en Ruanda, incitado por los líderes católicos locales, cuya culpabilidad está ampliadamente documentada, quizá no le era conocido, a pesar de haber ocurrido pocos años antes.) Para Cañizares, el secularismo es como el Tercer Reich porque desea “apartar al hombre de Dios”.

Si “apartar al hombre de Dios” significa “dejar de darle vía libre a los vendedores de religión para entrar en el gobierno, las escuelas, los hospitales y nuestras habitaciones, para que dicten leyes, aprueben o censuren programas educativos, nos digan cuántos hijos podemos tener o cuándo podemos morir, y con quién y de qué manera podemos tener sexo”, entonces sí, queremos apartar al hombre de Dios.

El secularismo no pasa de eso y yo, por mi parte, me conformo con esa módica separación. Aunque a veces, es verdad, me gustaría contestarle a gente como Cañizares que efectivamente, quisiera apartar de la mente de mis congéneres la funesta idea de Dios. No sólo porque sea una mala idea, sino porque es la que da de comer a personas pequeñas y despreciables como los cardenales y los papas.

viernes, 22 de julio de 2011

El jardín de infantes del horror asexuado

Una indignada agencia desinformativa católica reporta que un jardín infantil “asexuado” experimenta con niños y su identidad sexual. Se refiere a Egalia, una institución sueca cuyo proyecto educativo incluye el controvertido objetivo de lograr un ambiente en el que los niños no adquieran estereotipos de género. Entre otras cosas, se los enseña a referirse uno al otro con un pronombre neutro y no se dividen los juguetes en femeninos y masculinos. No hay “juegos de varones” y “juegos de nenas”, no hay cuentos infantiles del tipo princesa-conoce-a-príncipe-azul, y por supuesto no se pintan objetos ni lugares de rosa y de celeste para diferenciarlos. Quizá naturalmente, muchos de los niños que allí asisten son hijos de parejas homosexuales, aunque por supuesto esto no es exclusivo.

Es difícil saber si educar a un niño contra la corriente principal de la sociedad en la que vive (sexista, patriarcal y heteronormativa) es una utopía, si es realizable, o si es deseable cuando se la lleva al extremo de cambiar los pronombres. Quizá no sea el camino. Parece exagerado decir que se está experimentado con niños, como si de un laboratorio frankensteiniano se tratase. En un cierto sentido, todo aquél que cría un hijo está experimentando con él.

Pero la oposición católica a Egalia parte de que esta clase de enseñanzas va totalmente en contra de lo que predica la Iglesia: la posición heteronormativa esencialista que afirma que los hombres y las mujeres son lo único que existe, a la manera de formas platónicas, cada uno con una serie de atributos intrínsecos, siendo todo lo demás una perversión o una desviación. (Da la casualidad que el rol de la mujer, según esta iglesia cuyos líderes son sin excepción hombres, es inferior al del hombre.) No diría mucho más de esto, que es sabido por todos, si no fuera por lo incongruente de la justificación de las críticas. La psiquiatra consultada dice que 
“Un niño sano, varón o mujer, sabe y siente, desde antes de los cuatro años de edad a qué sexo pertenece.”
Si esto es así, ¿cuál es el problema? ¿Puede uno confundirse porque en vez de llamarlo con un pronombre sexuado se emplee uno neutro? (Si fuera así, ¿qué hacer con los miles de millones de niños cuya lengua nativa no diferencia entre “él” y “ella”?) ¿Puede un niño varón llegar a creer que es mujer, o viceversa, porque le den la oportunidad (no la obligación) de jugar con muñecas o en una sala pintada de rosa en vez de forzarlo a jugar con autos o revólveres de plástico en una sala de color azul?

Estudios científicos han mostrado que, con frecuencia superior a lo que se esperaría por el mero azar, los comportamientos infantiles contrarios al estereotipo de género correspondiente (por ejemplo, varones que juegan con muñecas o niñas que prefieren los entretenimientos físicos fuertes) pueden predecir una orientación homosexual en la vida adulta. Pero a todas luces esta desviación de las expectativas en los niños no es causa, sino efecto, de las raíces biológicas subyacentes de la homosexualidad. La sexualidad de los niños no se altera; ellos mismos “saben” cómo desean comportarse. Lo que ocurre es que para los católicos no existe la orientación sexual en este sentido. Existe lo correcto (hombre conoce a mujer, se casa, tiene sexo sin preservativo, procrea, da capo al fine) y todo lo demás es pecado o enfermedad. En ambos casos, el quiebre de los estereotipos se ve como un ataque al orden natural: una tentación a ir por el camino del mal (pecado) o una influencia psicológica y fisiológica indebida que daña al organismo (enfermedad).

El único “experimento” que se está llevando a cabo en Egalia es sobre la sociedad, no sobre los niños: es el experimento de observar cómo tratan los demás a niños perfectamente normales pero que no han sido condicionados con estereotipos de género. Lo más probable es que los niños se decanten solos por sus preferencias, y que de adultos sólo difieran de los demás en una mayor tolerancia hacia lo diferente.

miércoles, 20 de julio de 2011

Información vs. cristianismo

Josh McDowell
El apologista cristiano evangélico Josh McDowell ve confirmados sus peores temores:
“Internet le ha dado a los ateos, agnósticos, escépticos, a la gente que desea destruir todo en lo que ustedes y yo creemos, casi el mismo acceso a los hijos de ustedes que el que tienen su pastor o ustedes…”
Vale decir, ahora cualquier niño puede sentarse frente a una computadora y, con un poco de criterio y la ayuda de Google o Wikipedia, desengañarse de todas las mentiras con las que los padres y los pastores les han lavado el cerebro en nombre de Jesús. ¡Amén!
“Éste es el problema: desde el principio, cuando Al Gore inventó la Internet” (esto dicho en tono de broma) “yo estuve diciendo durante diez, once años que la abundancia de conocimiento, la abundancia de información, no llevaría a la certidumbre: llevaría a un escepticismo masivo. Y eso, amigos, es exactamente lo que ha ocurrido.”
No exactamente (¡qué buena noticia sería!), pero sí se ven algunas señales prometedoras. Ahora los jóvenes tienen la oportunidad de salir de la prisión del dogma mucho antes, apenas aprenden a usar Internet para relacionarse con personas fuera del patéticamente diminuto mundo del cristianismo fundamentalista.
Hace unos 15 años, añadió el apologista, cuando los ministerios juveniles cristianos recaudaban dinero para proyectos juveniles, la gran frase era: “Si no llegas a tu hijo cuando cumpla 18 años, probablemente no llegarás a él.” ¿Y cómo es ahora? “Si no llegas a tu hijo cuando cumpla 12 años, probablemente no llegarás a él.”
Esto me hace modestamente feliz. Si llegando a un solo niño puedo arruinarle la fiesta a vendedores de ignorancia y superstición como Josh McDowell, me considero satisfecho.

lunes, 18 de julio de 2011

Podcast, episodio 6

En esta edición del podcast de Alerta Religión: noticias de las Islas Británicas. En Inglaterra, el Rabino en Jefe (ortodoxo) denuncia que si el estado sigue imponiéndoles a las religiones dejar de discriminar y tratar a todos como iguales (mujeres, gays, etc.) van a terminar volviéndose a ir a Estados Unidos en un barco para poder tener “libertad religiosa”. Hace unos años había dicho que Europa se muere de vejez porque los ateos no tienen valores familiares, son egoístas y no quieren hijos. En Irlanda, el Ministro de Relaciones Exteriores llama al embajador de la Santa Sede para pedir explicaciones por el encubrimiento de abusos sexuales a niños, y los católicos rezongan porque se convertirá en delito no denunciar los abusos, incluso cuando hayan sido revelados en confesión: el secreto sacramental de la confesión “está por encima de todo” (la justicia, la decencia, la humanidad).

domingo, 17 de julio de 2011

Irlanda se planta frente al Vaticano


Ex-obispo John Magee
Noticias de Irlanda no suelen verse por este blog, pero hago una excepción porque me parece especialmente indignante lo que leo, y sólo se lo puede leer en inglés. No lo que ya sabemos casi todos: que en Irlanda hubo abusos y violaciones de niños por parte de sacerdotes católicos durante décadas, sin que la Iglesia hiciera nada por detenerlos. Tampoco el caso específico del encubrimiento de estos casos por parte del obispo John Magee, secretario privado de tres papas, que se vio obligado a abandonar su puesto en 2009. Y hasta la prensa católica se ha visto obligada a reconocer que el manejo de los casos de abuso en Irlanda fue pésimo.

Lo que no dice ningún medio de la Iglesia es que Magee actuaba dentro de la ley canónica y cumpliendo indicaciones emitidas directamente por el Vaticano. En efecto, la ley canónica dice que antes de reportar acusaciones de abuso por parte del clero a las autoridades civiles debe realizarse una investigación canónica interna. Repetidamente se ha visto que, cuando en esta investigación se encuentran delitos, se traslada al sacerdote a otra diócesis y se silencia a las víctimas con amenazas de excomunión u otros medios de presión, si es que ellas mismas no permanecen calladas por miedo o desconocimiento de sus derechos.

La gota que colma el vaso, en el caso irlandés, cayó cuando la investigación judicial determinó que la Congregación para el Clero había ordenado a los obispos irlandeses, en 1997, cumplir con la ley canónica y no intentar implementar un nuevo conjunto de reglas para lidiar con las acusaciones de abuso. Los obispos habían acordado un documento en el que se ordenaba a todos los clérigos reportar a la justicia civil las acusaciones. Desde el Vaticano se les avisó que esas reglas no serían convalidadas.

Lo que ocurrió hace unos pocos días en Irlanda es inédito y debería ocurrir en todos los países que tienen la desgracia de contar con cabezas de puente vaticanas en sus territorios: el Ministro de Relaciones Exteriores convocó al embajador de la Santa Sede para exigir explicaciones, entendiendo que la orden de no reportar los abusos equivale a una violación de la soberanía nacional. En efecto, se trató de un estado extranjero ordenando a ciudadanos irlandeses violar la ley de Irlanda.

(Una nota al margen. Cuando pasen por delante de una catedral u otra sede episcopal, observen las banderas que flamean frente a ella. La bandera blanca y amarilla del Vaticano siempre está allí, a la misma altura que la bandera del país. Es toda una señal de cómo las lealtades del clero católico, en cualquier punto del planeta, son como mínimo lealtades divididas.)

Esto quisiera escuchar yo alguna vez de boca de mis representantes, cara a cara con un embajador del pseudoestado vaticano:
“Hay una sola ley en este país y todos van a tener que aprender a cumplirla. El Vaticano va a tener que cumplir con la ley de este país. No vamos a dejar pasar esto. Queremos una respuesta del Vaticano a este reporte.”
Eso dijo Eamon Gilmore, Ministro de Relaciones Exteriores de Irlanda, a Giuseppe Leanza, el nuncio papal. No sabemos si Leanza se asustó o se ofendió, pero espero que algún efecto desagradable le haya provocado el súbito abandono de la deferencia con que desde hace añares, y sin justificación alguna, se viene tratando a los representantes de la teocracia más antigua del planeta.

(Y lo mejor de todo: el papa está pensando dos veces si visita Irlanda, como tenía planeado hacer el año que viene. Bastantes protestas ya se ha encontrado en todos los otros países donde fue.)

viernes, 15 de julio de 2011

Podcast, episodio 5

En esta edición del podcast de Alerta Religión hablo del pedido oficial de las iglesias católicas, evangélicas y protestantes a los misioneros para que no chantajeen ni engañen a aquellos a quienes desean convertir, de los grititos de víctima del vocero de la arquidiócesis de México por el “aberrante” cercenamiento de su libertad para hacer proselitismo político desde el púlpito, y de lo que mantenía la Iglesia sobre esa libertad de expresión hace apenas un siglo y cuarto.

jueves, 14 de julio de 2011

Palabras en la boca de los ateos

Hace bastante que no leo nada de WebIslam porque, vamos a decirlo, lo que publican allí es mayormente una mezcla de apologética musulmana muy básica y de esoterismo o magufismo. Pero cuando vi un artículo titulado El ateísmo en mi lector de feeds, tuve que curiosear.

El que escribe se llama Abdennur Prado. Propone que en realidad el ateísmo occidental (suenan alarmas ya en este punto) no es más que el rechazo de la idolatría cristiana. El Dios cristiano es una persona, se ha encarnado, es concebible parcialmente como un ser humano con quien se puede tener una relación inteligible. El “ateísmo occidental” sería la negación de esta concepción cristiana. Los ateos que rechazamos el islam en realidad lo hacemos porque rechazamos de plano toda religión; si comprendiésemos el islam nos daríamos cuenta de que Dios es la Realidad:
Dios es más grande. Más grande que cualquier cosa que se pueda decir, pensar u afirmar de Él. Es una Realidad inabarcable para el ser humano, la propia estructura viviente de las cosas, el fundamento de todo cuanto existe, la misericordia que hace surgir vida de la tierra muerta fertilizada por la lluvia. Negar a Al-lâh equivale a negar la propia existencia de las cosas.
Prado reconoce como legítimos los motivos del ateísmo, pero dice que se queda a mitad de camino: el ateísmo niega el dogma, niega las afirmaciones sobre Dios, niega el concepto de Dios como persona, como concepto abarcable por la mente humana y por lo tanto manipulable, niega que se lo pueda representar, y en todo esto —afirma— es igual al islam, pero el islam da un paso más y reconoce que sólo hay un Dios, es decir, una Realidad. Los ateos tenemos una imagen infantil de Dios (la que nos ha vendido el cristianismo) y al rechazarla cometemos el error de rechazar al verdadero Dios.

Todo esto es interesante y sería muy útil para tener en cuenta si no fuera por sus múltiples fallas. En primer lugar, el islam ilustrado de Prado y similares no es el islam que siguen mil millones de personas en el planeta; de hecho apostaría a que Prado sería ahorcado o lapidado por blasfemia en casi cualquier lugar del mundo musulmán, o cuanto menos colocado en una lista negra, por negar que se pueda acceder a las intenciones divinas (¿qué sería de los mulás, los ayatolás y demás parásitos si así fuera?). En segundo lugar, es patentemente falso que el islam no sea dogmático o no emplee representaciones de Dios; siendo una religión fuertemente literalista, todo el Corán es como un gran dogma de muchos capítulos (hágase la prueba de negar la veracidad de un solo versículo, si no), y para los fines prácticos Mahoma, el Profeta, funciona como un dios subalterno, de quien se toman ejemplos y preceptos morales como palabra santa e inerrable.

En tercer lugar, y mucho más importante según lo veo, el ateísmo no es la simple negación del Dios cristiano. Existe ciertamente un ateísmo reactivo y hasta un ateísmo infantil; todos conocemos ateos que niegan a Dios y blasfeman de puro gusto y rebeldía, pero por la poca elaboración intelectual que han hecho caen de lleno en los brazos de misticismos varios o de pseudorreligiones como el comunismo o la creencia en extraterrestres benévolos que nos vigilan. Esos ateos, con un esfuerzo considerable de negación de la realidad, podrían ser convencidos de que el islam en su variante más abstracta —como plantea Prado— es una espiritualidad afín. La mayoría de nosotros, me atrevo a decir, no.

Lo de Prado suena muy similar a lo de muchos teólogos cristianos, también preocupados por la imagen infantil que los creyentes tienen de Dios, que transforman a Dios en un concepto inefable e inabarcable en escritos complicadísimos que luego sólo ellos leen. Esta imagen está bastante a salvo de críticas ateas precisamente porque es infalsable, además de irrelevante. La religión a nivel práctico, que es el que nos ocupa salvo que seamos estudiosos profundos del tema, no se basa en conceptos tan elevados y puros.

El concepto de Dios no es abarcable, no porque Dios sea una Realidad superior a nuestro intelecto, sino porque es absurdo. Esto es lo que se llama, si lo entendí bien, ateísmo esencial. Nadie sabe lo que dice cuando dice “Dios”. Por eso, mal que le pese a Abdennur Prado, yo no creo que su dios sea distinto, en ningún sentido fundamental, de los otros constructos verbales sin sentido que pululan en las mentes humanas.

martes, 12 de julio de 2011

Podcast, episodio 4

El cuarto episodio del podcast de Alerta Religión está online. El tema es una noticia de InfoCatólica  que dice que el 80% de las jóvenes embarazadas deciden no abortar cuando reciben apoyo, siendo esta muestra tomada de la organización criptocatólica Fundación Red Madre, y el “apoyo” unos 500 euros por mes durante un tiempo y un montón de advertencias terroríficas sobre el aborto, incluyendo la posibilidad de desarrollar el inexistente “síndrome post-aborto”.

domingo, 10 de julio de 2011

Sexo seguro (parte 3)

Termino con mi análisis del portal criptocatólico Sexo Seguro. El tema de esta entrega es la homosexualidad. Los invito a leer mi post en el blog del Círculo Escéptico Argentino: Sexo seguro (parte 3).

No voy a escribir más sobre este portal desinformativo porque supongo que ya ha sido más que suficiente para mostrarles la capacidad de los católicos fanáticos para mentir, distorsionar y aterrorizar. Me han preguntado si hay alguna manera de denunciar este tipo de páginas web, y la verdad es que no lo sé. Supongo que debe haber leyes que prohíban la propagación de información médica falsa. Lo que intenté con estos tres artículos fue, en realidad, darles a los lectores algunos elementos con los cuales puedan responder y rebatir a los propaladores de doctrinas que se hacen pasar por ciudadanos comunes respaldados por la ciencia.  

sábado, 9 de julio de 2011

Alerta Religión tiene nuevo logo

Como ya habrán notado si han entrado al blog a leer esta nota, Alerta Religión ha cambiado de logo. El logo anterior, aunque era más inclusivo, también era mucho más complejo, y eso hacía difícil utilizarlo como ícono, incluso en forma resumida, en las redes sociales. La versión que ilustra el tope de la página del blog se complementa con la versión icónica, más reducida y sin texto, que pueden ver aquí a la derecha.

En el nuevo logo desaparecen las religiones (y las pseudorreligiones) menos comunes o menos relevantes, y quedan representadas aquellas que más me han ocupado durante estos años. El judaísmo es minoritario a nivel mundial y también en Argentina —desde donde escribo—, pero no podía obviarlo como religión madre de las que llamamos abrahámicas. Del cristianismo no hace falta hablar… El islam tiene una influencia cada vez mayor a nivel geopolítico y no podía soslayarlo. Pero la intención de poner ahí a la mujer con su burqa no era sólo aludir al mundo musulmán sino a temas comunes a todas las religiones: el sometimiento de la mujer, la negación de los atributos y deseos del cuerpo, la restricción forzada de la visión.

Este último punto me recuerda también el último capítulo de The God Delusion, de Richard Dawkins, titulado precisamente “La madre de todas las burkas”, donde compara nuestras capacidades sensoriales con un velo que sólo nos permite ver una pequeñísima fracción de la realidad, un velo que la ciencia y la tecnología han podido rasgar. Las religiones no sólo restringen y distorsionan nuestra visión moral y ética —por ejemplo, elevando a mandamiento la sumisión a un dios inexistente, o calificando de inmorales acciones que no dañan a nadie—, sino que también han estado en contra de la ampliación de nuestra visión de la realidad a través de la ciencia siempre que esa ampliación implicase una amenaza a sus doctrinas. Detrás de esa burqa no está sólo el ícono de una mujer musulmana: estamos, en potencia, todos nosotros.

viernes, 8 de julio de 2011

Todo esperma es sagrado (Monty Python)

Un amigo protestante me sugiere comenzar con una sección de “videos divertidos de los viernes”, algo así como una forma de relajarnos para el fin de semana. Aquí está su primera sugerencia. Seguro que muchos de ustedes ya lo conocen, pero vale la pena volverlo a ver y escuchar para reírse. La caracterización de los católicos y los protestantes es apenas un poquito exagerada.

jueves, 7 de julio de 2011

Podcast, episodio 3

El tercer episodio del podcast de Alerta Religión está online desde ayer. Los temas tratados: algunas noticias de ACIPrensa relacionadas con el aborto — la campaña de Natalia Fassi y Cynthia Hotton contra las mujeres, la “carta de un niño por nacer” que los fanáticos le enviaron al presidente electo de Perú, Ollanta Humala, la queja del vocero del arzobispado de México de que no se respetó su libertad de expresión al sancionárselo por hacer proselitismo desde el púlpito, y un reporte de cómo lo mismo está ocurriendo en Argentina, con ayuda de sitios como votovalores.org.

miércoles, 6 de julio de 2011

Podcast, episodio 2

Desde ayer está online el segundo episodio del podcast de Alerta Religión. Es un poquito más largo (unos 7 minutos) y ya tiene una breve cortina musical. Hace referencia al artículo Europe: less secular than you think, del poeta, escritor y traductor Marc Alan Di Martino. Entre los temas tratados está el del otto per mille, la porción del impuesto a las ganancias que Italia destina (mayormente) a subsidiar a la Iglesia Católica. Escribí sobre una campaña contra el otto per mille hace poco menos de un año.

martes, 5 de julio de 2011

Ahora con podcast

¡Alerta Religión tiene un podcast! El primer episodio ya está online: se puede escuchar directamente desde aquí o bien bajarlo (es un archivo MP3 de unos 3 MB). Para los lectores no es una gran novedad porque habla del tema de la “predisposición a la religión” del post del otro día, pero es un ensayo; pronto habrá en el podcast contenidos que no se encuentran aquí. Esta primera entrega es un poco tosca pero espero poder mejorarla pronto. No será mucho más larga que cinco minutos, ya que escuchar largos monólogos puede ser aburrido.

La idea de hacer este podcast me venía rondando la cabeza hace tiempo, pero me decidió la sugerencia en ese sentido de Julián Rodríguez Orihuela, a quien —después de tratar vía internet durante un par de años— tuve el gusto de conocer en persona hace una semana en Buenos Aires. Es el primer podcast individual que grabo y apenas el segundo en el que participo (el otro es el del Círculo Escéptico Argentino), y espero sepan disculpar las torpezas iniciales. ¡Saludos!

lunes, 4 de julio de 2011

Natalia Fassi contra las mujeres

Natalia Fassi es una modelo argentina que se gana la vida vendiendo (la imagen de) su cuerpo, profesión perfectamente respetable pero que pocos asociarían con causas afines al conservadurismo sexual o a la misoginia típica del cristianismo. La modelo y “actriz” de teatro de revista (llamarla vedette es demasiado, llamarla actriz un insulto), protagonista de fotos y videos hot y de bailes sensuales para la TV basura, sería probablemente el peor ejemplo para quienes ahora la alaban desde el catolicismo y el evangelismo, si no fuera por un pequeño detalle.

El detalle es que Fassi es “pro-vida”, es decir, está a favor de considerar a los cigotos como personas y en contra de la vida y la salud de las mujeres que no deseen quedar embarazadas o continuar con un embarazo que no desearon. Así lo expresan elocuentemente las fotos que a partir de hoy la muestran, en el Museo Parlamentario del Senado argentino, con sangre falsa en la entrepierna y la palabra VIDA tatuada sobre su vientre hinchado por un embarazo de ocho meses y perforado por agujas que ella misma sostiene. Terrorismo mediático, como lo llama Natalia Garavano en Página/12, que demoniza a las mujeres que abortan por necesidad, generalmente en condiciones inseguras, en medio de una pobreza y una confusión desesperantes.

Esta clase de campañas de shock se basan invariablemente en falsedades: por ejemplo, la idea de que todas las mujeres que han abortado sufren de trastornos psicológicos (un supuesto “síndrome post-aborto” que no es reconocido por ninguna organización médica) y la imagen de una mujer que aborta cuando su embarazo está avanzado, matando a un feto que es ya un “bebé” (en este mismo tema se inscriben las imágenes de fetos descuartizados y ensangrentados, presentados como abortos provocados, cuando en realidad se trata de abortos espontáneos o de muertes fetales en etapa tardía).

La campaña fotográfica es auspiciada por la diputada del “partido evangélico” Valores para mi País, la infame Cynthia Hotton que lideró la lucha contra el derecho de las parejas homosexuales a casarse.

viernes, 1 de julio de 2011

Predispuestos a creer

Un estudio científico sobre psicología infantil encontró algunas tendencias muy interesantes con respecto a la manera en que los niños perciben lo que ocurre en el mundo. Específicamente se halló que los bebés y los niños pequeños tienen una gran tendencia a atribuir los sucesos a la intencionalidad de agentes conscientes o a una teleología. Los niños son instintivamente dualistas y tienden a adscribir propósitos a lo que ven.

De estas conclusiones fascinantes pero no inesperadas muchos apologistas religiosos han extraído la idea de que

  • Es natural creer en Dios,
  • Desde bebés tenemos ideas religiosas,
  • La fe es un instinto humano básico,
  • Sólo se puede ser ateo si uno es culturalmente forzado a serlo,
  • El secularismo y el ateísmo son antinaturales y van a fracasar,
entre otras cosas. Un ejemplo desarrollado de todas estas falacias puede encontrarse en cierto blog parroquial en cuyas páginas caí por casualidad, y que es tan bueno como cualquier otro (hay muchas otras fuentes, pero todas en inglés).

Estos puntos son falaces porque en ninguna parte del estudio se habló de Dios (con mayúscula) ni de un dios o dioses (con minúscula) en particular o en general. Tampoco se habló de religión ni de fe. Todo lo que estudio mostró fue que los niños son crédulos de una manera particular que los vuelve más vulnerables a la prédica religiosa.

Uno podría creer que la culpa (como suele ocurrir) la tienen los medios que reportaron los hallazgos del estudio, pero la unanimidad de su distorsión hace fácil ver que la falacia proviene directamente de los autores y de quien pagó el estudio. Uno de los investigadores, Justin Barrett, es un cristiano devoto que ha dicho que el estudio confirma su fe en Dios (su dios, no otro). El otro, Robert Trigg, es un filósofo cristiano que afirma que los derechos humanos tienen raíces religiosas y cristianas y que prescindir de éstas haría imposible sostener aquéllos (Benedicto XVI podría estar hablando por su boca). Barrett está feliz de haber encontrado que los niños son —como generaciones de padres, sacerdotes y catequistas sabían empíricamente de antemano— susceptibles a creer en explicaciones intencionales o teleológicas (por ejemplo, “A la mujer le cayó un rayo porque era impúdica y Dios la castigó” o “Se enfermó y se murió porque Dios quiso llevársela al cielo”), y proclama que eso prueba que Dios y la religión están entre nosotros desde que el hombre es hombre, prefiriendo ignorar que la inmensa mayoría de las religiones siempre han sido animistas e informales. El teísmo dogmático es un fenómeno relativamente nuevo; el monoteísmo y las jerarquías clericales son aún más recientes.

El estudio costó casi dos millones de libras. Lo pagó la Fundación Templeton, una organización filantrópica creada por un multimillonario devoto que fomenta el “diálogo entre ciencia y religión” y otorga jugosos premios a científicos que proclamen la compatibilidad y complementariedad entre la razón y la fe. Ya lo saben: cuando Templeton es el sponsor, el producto siempre viene trucado.